A medida que alcanzan el punto óptimo de maduración, las uvas de Tempranillo, Syrah, Garnacha y Cabernet Sauvignon, son vendimiadas y fermentadas en tanques de acero inoxidable a una temperatura que oscila entre los 25º y los 29ºC.
Posteriormente se realizan maceraciones que duran de 2 a 4 semanas según variedad, a la vez que se realiza la fermentación maloláctica. Una vez finalizada, los vinos pasan a barricas de roble francés de 2º y 3º uso de 225 litros de capacidad. Los meses en barrica dependen de la variedad y la añada, siendo 9 meses el tiempo medio de crianza.
Una vez terminada la crianza, se procede al coupage de las diferentes variedades y a una clarificación natural por gravedad, para dejar el vino brillante antes de su embotellado.
Vino de color rojo picota de alta capa y ribetes violáceos. En nariz es fresco e intenso con notas de fruta roja madura. En boca es suave y con volumen gracias a un tanino redondo y aterciopelado. El paso por boca es suave y fresco, dando paso a un final largo, donde se mezcla la fruta roja con los tostados propios de su crianza durante 9 meses en barrica de roble francés.