Las cepas de las que procede Bru son un conjunto de diferentes clones de Pinot Noir, único en la zona del Penedés. Se trata de un vino muy vivo, capaz de mostrar la personalidad de cada añada en particular. Un vino en el que reina el equilibrio entre la elegancia de la variedad y el cálido carácter mediterráneo.
Complejo en aromas, donde se entremezclan las notas de frutas con las de especias más refinadas.
Es un vino seductor, rotundo y de final largo.
BODEGA |
Gramona |
D.O. |
Penedés D.O. |
FORMATO EN L |
0.75 |
PESO EN GRAMOS |
1100 |
GRADUACIÓN |
12,0º |
AÑADA |
2018 |
VARIEDADES |
Pinot Noir |
CERTIFICADO |
Agricultura ecológica-Demeter |
TIPO DE VINO |
Vino tranquilo |
PAÍS |
España |
REGIÓN |
Cataluña |
PUEBLO/CIUDAD |
Sant Sadurní d'Anoia (Barcelona) |
Viñedo: Suelos arcilloso-calcáreo con cantos rodados. El conjunto de clones de pinot noir plantados en estas viñas en 1986 hace que, añada tras añada, el carácter del vino adquiera una personalidad muy peculiar.
Vinificación: Una vez vendimiadas, las uvas pasan por la mesa de selección. Después, la maceración y la fermentación tienen lugar en un fudre de 3.000 litros. Durante la elaboración se producen bazuqueos tradicionales poco agresivos durante dos semanas. Acabada la fermentación, sólo se utiliza el vino de sangrado, con el que se llenan las barricas de 300 litros de roble francés Allier. Allí se realiza la fermentación maloláctica y la posterior crianza con lías finas hasta el inicio de la primavera.
Hablar de Gramona es hablar de calidad, de artesanía, del paso del tiempo y de cómo las nuevas generaciones cogen miman y hacen crecer lo que las antiguas dejan en sus manos. Hablar de Gramona significa hablar de tradición que no va desatada de la innovación. Cuando alguien pone la marca Gramona en la mesa todo el mundo sabe que beberá buen vino. Gramona es una bodega muy conocida por sus espumosos amparados bajo la marca colectiva Corpinnat. Pero también son grandes elaboradores de vinos tranquilos; blancos, rosados, tintos y dulces. Es una bodega con raíces muy fuertes en el Penedès, tierra que reivindican en cada uno de sus vinos. Además trabajan con agricultura ecológica, biodinámica y sostenible cuidando la tierra y sus cultivos simultáneamente. Generando muy buenas sinergias entre el resultado que desea el viticultor y la flora y fauna del entorno. Técnicamente, sus vinos son impecables obras de enólogos muy dedicados a dar lo mejor de sí mismos para dejar el campo expresarse a través de la copa. Por este y otros muchos motivos repito, poner un Gramona sobre la mesa es sinónimo de que bebaremos buen vino.